Llegan a través de correos electrónicos, mensajes fraudulentos, descargas de aplicaciones o llamadas con falsas alarmas. Los ciberdelincuentes se vuelven cada vez más sofisticados en sus métodos y, para la Fiscalía de Galicia, representan «la amenaza más grave al derecho a la privacidad». El incremento de estafas por medios informáticos es constante, especialmente desde la pandemia, aumentando un 500 % en España en los últimos ocho años. En el primer trimestre de este año, ya se han registrado 5.700 casos en Galicia.